domingo, 25 de septiembre de 2011

D:

Tengo ganas de actualizar el blog, pero la inspiración no llega, aún así me lanzo a escribir lo primero que salga, siento que se lo debo al blog, muy botado lo tengo, pero me carga escribir por obligación, sin embargo es por obligación que hago mejor las cosas, o será que por obligación hago las cosas?... lo más probable es que de no ser por la obligación ni siquiera me levantaría...pero no estoy aquí para hablar de obligación, responsabilidad o deberes, que poco recuerdo de eso ya a esta altura, y es que cuatro meses de hacer nada le tienen que pasar la cuenta a uno de alguna manera, cuatro meses de qué? de falsas expectativas, falsas esperanzas, falsas promesas, puras falacias? Y es que hasta dónde se puede llegar para defender un ideal? vale la pena recorrer la incierta senda de la lucha sabiendo que lo único cierto es la inminente derrota? Será fructífero levantarse, resistir, impugnar  una y otra vez, una y otra vez, aún sabiendo que los sueños no se vuelven realidad?... Será lógico que suene cuerda la ilógica idea de sacrificarlo todo para ganar algo, de que hablamos entonces?, altruismo? osadía?...sin duda me suena tan absurdo como decir que como no tengo nada voy a darlo todo, por favor! si no tengo nada qué voy a dar? dar para recibir? perder para ganar? pero que lógicamente iluso me suena ahora.... soñadores... ojalá pudiera hablar de valientes héroes que luchan por la igualdad, la democracia, el respeto y la tolerancia, pero si hablara de eso estaría siendo tan ilusa como ellos, y es que es una pena ver como los significados de las palabras cada vez se van volviendo sólo más palabras, vacías palabras usadas para llenar espacios, palabras abusadas, profanadas, ultrajadas, que a la larga terminan diciendo nada, a veces el silencio dice más que mil sinónimos usados en una misma oración, por nada dicen que el hombre sabio incluso cuando calla, dice más que el necio cuando habla, y será de sabios saber escuchar y leer el silencio, tal vez, como sea, prima aprender a escuchar a las palabras, poder oír lo que en sus silenciosos gritos tratan de decir, y es que se imaginan que lindo sería, que distinto sería, si fuéramos capaces de sentir, hablo de algo más allá de comprender teóricamente, el significado de cada palabra? y que necesario me parece, y poner un poco de esfuerzo en ello no nos haría daño, me parece primordial que antes de intentar cambiar al mundo, intentemos cambiarnos a nosotros mismos, que dejemos de lado nuestra desidia lingüística, que dejemos de escupir la primera palabra palabra que se nos viene a la mente, propongo que antes de embarcarse en luchas por la justicia social con consignas que suenan hermosas, nos preocupemos de la semántica antes de preocuparnos de la rima...
Sé bien que por algo se pide educación de calidad, mas pienso que hacerle justicia  a las palabras, y preocuparse por el valor que tiene cada una de las que usamos, aunque sean pocas, corre por cuenta nuestra... que aprender no es lo mismo que aprehender, no sólo aprendamos significados, sino que también ''aprehendamos''.